LA SOCIEDAD COLONIAL Y LA FORMACIÓN DE LA ÉLITE CRIOLLA
Competencia: Construye interpretaciones históricas
Capacidades: · Interpreta críticamente fuentes diversas · Comprende el tiempo histórico. · Elabora explicaciones sobre procesos históricos
La conquista española produjo una profunda transformación de la población andina. Así, se formó una sociedad jerarquizada y estratificada con unas marcadas distinciones étnicas, sociales y jurídicas.
Una sociedad dividida
La llegada de los españoles al Tahuantinsuyo produjo una transformación en la población andina y una reestructuración social general. Así, se formó una sociedad estamental y jerarquizada, en la que hubo distinciones de tres tipos:
- Étnicas. Se dividió a la población en españoles, indios, negros y castas (mestizos, mulatos, zambos, entre otros.)
- Sociales. Se agrupo
a la población en tres grupos: aristócratas, plebeyos y esclavos.
- Jurídicas. Se distinguieron dos categorías: la república de españoles, compuesta por los peninsulares, criollos y mestizos legítimos; y la república de indios, integrada por la población indígena. Doc. 9. La población negra esclava estuvo excluida por carecer de derechos.
Criterios de la
diferenciación social
En la Colonia hubo diversos criterios para diferenciar a
las personas. Una de las más importantes era su posición en la sociedad colonial. Durante las primeras décadas,
los conquistadores y los encomenderos pertenecían a la élite más destacada, así
como los miembros de la nobleza indígena.
También era de gran importancia la riqueza, la cual, en muchas ocasiones, permitía el ascenso social a cualquier individuo, aunque los medios de enriquecimiento eran de difícil acceso a la mayoría de la población.
En tercer lugar, la posición de los individuos dependía de la relación de sus padres al momento del nacimiento, por lo que eran mejor considerados los hijos que provenían de un matrimonio legítimo. Esta condición era importante para una persona que quería obtener una designación en cualquier cargo público o eclesiástico. Finalmente, las personas se diferenciaban por su actividad laboral y su grado de cultura o acceso a la educación.
El mestizaje y las
castas
Al inicio de la Colonia, la desproporción entre hombres y mujeres peninsulares era muy grande; había una mujer por cada diez hombres. Eso explica en parte el fenómeno del mestizaje, producto de la unión de varones hispanos con mujeres indígenas.
Los mestizos conformaron el grupo social que se aculturó más rápidamente, es decir, que asimiló con mayor facilidad la cultura hispana. Sin embargo, debido a que la mayoría de ellos eran hijos ilegítimos, fueron discriminados. Eso produjo el desarraigo de estas personas, que no se identificaron con ninguno de los grupos de los que procedían. Con el tiempo, el mestizaje se hizo más complejo. Y dio origen a nuevos grupos raciales llamados castas. Doc 10. Este proceso fue visto con preocupación por la administración colonial, que consideraba que las mezclas raciales producían personas conflictivas y ociosas. Doc. 11. Por ello, la Corona aplico una legislación para regular las relaciones entre los diferentes grupos sociales y asegurar a los españoles un lugar privilegiado.
Los españoles
Los españoles ocupaban un estrato más alto de la pirámide social. En este grupo minoritario, los más privilegiados eran los encomenderos, hacendados, comerciantes, mineros y funcionarios (civiles y eclesiásticos), así como los nobles que llegaban con los virreyes. Los allegados a estas autoridades conocidos como paniaguados eran los principales candidatos a recibir prebendas (oficios poco trabajosos y muy lucrativos). No obstante la mayoría, de los españoles que llegaban al Perú eran de extracción popular que buscaban nuevas oportunidades en las tierras conquistadas. La llegada de los españoles, al Perú fue asegurada por el Estado español. Que hasta el siglo XVI fomentó el traslado de centenares de colonos y sus familias.
Un rasgo particular que se produjo después de la
conquista fue la distinción que se comenzó hacer entre los españoles venidos de
Europa- a quienes se llamaba peninsulares o chapetones- de aquellos nacidos en América:
Los criollos. Esta distinción originó poco a poco una fuerte rivalidad política
y social entre ambos sectores.
Los indígenas
Los indígenas fueron, en teoría el segundo grupo en la escala social: la república de indios estaba situada después de la república de españoles debido a que eran reconocidos como vasallos y tributarios de la Corona. No obstante, en la práctica se encontraba (con excepción de la nobleza incaica, los curacas y algunos indios prósperos como mercaderes y artesanos) al final de la pirámide social, incluso debajo de los mestizos y las castas. Entre los indígenas hubo dos tipos de actitudes. Una minoría se integró voluntariamente a la nueva sociedad y se hispanizó, como los curacas, quienes mantuvieron cierto poder y prestigio social. Doc. 12. La mayoría, sin embargo, desarrollo una actitud pragmática frente a la aculturación: tomaron de la cultura española los elementos que consideraban útiles y mantuvieron algunas de sus costumbres ancestrales, formando así una cultura híbrida. Este grupo, formado por la gran masa indígena, fue el más marginado. Doc.13.
Los esclavos de origen africano
La población negra llego al Perú por la necesidad de mano de obra ante el descenso demográfico de la población indígena. Se les consideraba bienes, por los que se les podía comprar, vender, alquilar, depositar o regalar. Doc.14. A los esclavos negros los trajeron los negreros portugueses, holandeses, franceses e ingleses en condiciones infrahumanas.
Fueron numerosos en Saña, Chancay, Lima, Cañete, Chincha, Pisco, Ica y Nasca. Muchos esclavos establecieron relaciones estrechas con sus amos, lo que se manifestó en el gran número de esclavos manumisos o libertos. Sin embargo, también hubo casos de rebelión o huidas masivas conocidas como cimarrones. Los esclavos cimarrones vivían en campamentos ubicados en las afueras de la ciudad conocidos como palenques. Estos negros cimarrones se dedicaban al robo y el bandolerismo, por lo que fueron reprimidos violentamente por las autoridades. Las mujeres esclavas se dedicaban mayormente a actividades caseras y, en menor medida, a la realización de labores de campo, como en los viñedos o algodonales.
LA FORMACIÓN DE LA ÉLITE CRIOLLA
Durante el siglo XVII se conformó una nueva élite en el virreinato,
que era predominantemente criolla. incluía a grandes comerciantes, mineros,
hacendados y funcionarios coloniales.
La élite criolla
Los hijos de españoles nacidos en las colonias americanas y todos sus descendientes formaban una élite social. Los criollos fueron encomenderos, hacendados y ganaderos, tuvieron obrajes y fincas urbanas. Su patrimonio fue transmitido de generación en generación gracias al mayorazgo, derecho concedido al primogénito que lo hacía heredero de todos los bienes de una familia. Así se mantenían unidas y consolidadas todas las posesiones.
La conformación de una identidad criolla
A inicios del siglo XVII, los criollos tomaron conciencia
de su situación particular respecto a los españoles nacidos en la metrópoli. Esto
se manifestó en situaciones de conflicto en tres distintos ámbitos:
Conflictos de índole
cultural
Durante el periodo colonial hubo una constante inmigración
española. El origen geográfico de los
migrantes influyó en el modo en que se integraban a la naciente sociedad
criolla colonial. Los primeros colonizadores, en su mayoría de origen andaluz o extremeño, determinaron en cierta medida las costumbres y el estilo
de vida que adoptó la sociedad colonial.
Hacia el siglo XVIII se incrementó el número de inmigrantes, españoles provenientes de otras regiones (especialmente del norte de España), este nuevo sector se acomodó menos a los parámetros de la sociedad colonial y asumió una actitud arrogante y despectiva frente a los naturales del país. En respuesta, los criollos empezaron a crear algunos términos peyorativos como chapetones o godos para destacar sus diferencias con los españoles recién llegados.
Los criollos rápidamente tomaron conciencia de su situación
singularmente desventajosa en el
mundo colonial, pues las funciones de gobierno dentro del virreinato eran encomendadas
a los peninsulares que llegaban de la metrópoli. por ello, reclamaban a la Corona
una mayor participación en las funciones de gobierno, pues según su opinión
conocían mejor el espacio colonial y sus necesidades que cualquier funcionario
venido de España.
Conflictos de índole
económica
Uno de los más fuertes reclamos de los criollos estuvo
relacionado con las encomiendas. Durante muchos años. Los descendientes de los
conquistadores buscaron obtener la perpetuidad
de las encomiendas para mantener su estatus social. No obstante, la Corona
percibió que esta medida pondría en peligro su autoridad, por eso, determinó
que las encomiendas estuvieran en manos de una familia por dos generaciones y
que después volverían a poder del Estado. Esta medida perjudicó las expectativas sociales de los primeros criollos
descendientes de los encomenderos, y configuró su identidad social,
caracterizada por su abierta oposición al poder de la Corona Doc,15.
La constitución de la élite criolla
El denominador común de la élite criolla era la posición de
una gran riqueza y el notable afán de pertenecer la aristocracia. Para conseguir
ese objetivo, desarrollaron diversas estrategias.
- La consolidación
de la fortuna familiar mediante la creación
de mayorazgos (derecho del hijo mayor a heredar los bienes de la familia),
los cuales aseguraban la preservación de patrimonio por varias generaciones.
- Las alianzas matrimoniales con otros clanes aristocráticos.
- La obtención de un título nobiliario, objetivo que fue facilitado por la Corona española, que (agobiada por falta de ingresos) encontró una forma rentable de conseguir fondos a través de la venta de títulos nobiliarios.
El éxito de
esta nueva élite fue emulado por las familias criollas de nivel inferior que no
pertenecían a la aristocracia, que buscaron otros símbolos de estatus (pertenecer
a una orden militar, entrar en la guardia virreinal o ser benefactor de un
convento) que les permitiese consolidar el prestigio social.
El poder político de los criollos
El éxito social y económico de los criollos no fue bien
visto por la Corona que siempre sospechó del grado de subordinación y lealtad
de sus súbditos americanos.
En consecuencia, las autoridades españolas dictaron una
serie de medidas para restringir el acceso de los criollos a los cargos públicos.
En vista de ello, los criollos (para quienes el ascenso no era suficiente sino
estaba acompañado de la posibilidad de gobernar el territorio que consideraban
propio) iniciaron una larga batalla por la igualdad
de derechos en el acceso a la burocracia.
La situación empezó a cambiar a partir de una medida impuesta
por la propia Corona en 1633 para financiar sus deudas: la venta de cargos públicos. Estos cargos fueron comprados por los
criollos adinerados, por lo que la administración pública se llenó de personajes
poco preparados para la función que asumían, además estos, buscaban recuperar
el dinero invertido al comprar el cargo, por lo que incurrirán en actos de corrupción.
A largo plazo, esta práctica deterioró la autoridad real debilitó la calidad del
servicio público.
La lucha por el poder político fue mucho más visible en
el ámbito de las audiencias, pues la Corona marginó a los criollos del cargo de
oidor argumentando que no podían ser imparciales y que carecían de preparación adecuada.
Por ello, dichos cargos no se pusieron, inicialmente a la venta. Pero en 1687
la Corona cambio esta disposición, y así lo criollos pudieron acceder
masivamente a las audiencias.
Este video te ayudará a comprender mejor
DOCUMENTOS
Comentarios
Publicar un comentario